Regresar, buscar como arqueólogos piezas que marcaron nuestra infancia y adolescencia: juguetes, un pañuelo, algunos regalos, libros, íconos; recordar voces, gestos, rostros vinculados con esos objetos, y ponernos a pensar qué nos significaron, qué huellas nos dejaron, nos lleva a reconocernos, a descubrir identidades. En la literatura o en el cine, ha habido autores que nos hacen viajar al pasado; uno de ellos es el escritor cubano Alejo Carpentier. Además de leer su Viaje a la semilla, intentaremos realizar nuestros personales viajes en busca de libros y otros impresos que nos hayan dejado su cicatriz, su ceniza, su polvo, su aliento.
El viaje hacia el pasado ha sido un tema presente en la literatura y el cine. Invitamos a ver Doce monos de Terry Gilliam y La jetée de Chris Marker.