Próxima parada estación «Infancia»

Tomando como punto de partida el concepto de paradas o estaciones, Frida Cartas presentó su libro «Transporte a la infancia» acompañada por David Loría Araujo y Cybéle González Sosa como parte de las actividades de la FILEY 2024.

La primera estación de partida es la portada del libro, continuando con la lectura de un fragmento representativo. En la segunda se permitieron hablar de la Frida que vemos en el libro, la niña que va creciendo y también, de la violencia de género, el bullying y las opresiones que viven las personas que no cumplen el mandato cultural y social de lo que debe ser un hombre sobre su clase, la marginación económica, entre otras cuestiones. Al respecto la autora comentó que en su infancia recibió maltrato y humillaciones como niña, siendo que ya de grande revive la situación dándose cuenta de que aunque no la nombraran así, siempre la trataron dentro del ejercicio de convivencia, desde la familia, la escuela, los médicos que la atendieron, lo que solo tuvo reivindicación hasta que llegó a la adolescencia.  

La tercera estación es dedicada a la «Madre», pasaje del cual Frida, confesó que lo escribió con sentimientos encontrados, declarando que se puede observar muchas veces en la lectura todas estas emociones plasmadas. También comentó que quiso dejarle el libro como un regalo a su mamá, siendo que son las mujeres quienes acompañan la crianza, y hablando de su infancia trans, ella siempre estuvo allí, siendo una mamá muy empática; al respecto del libro si lo describieran como discurso político para ella sería: «El vínculo de una mujer cis y una mujer trans: a mamá y la hija».

En la cuarta estación se habló de la espiritualidad, siendo que hay una constante búsqueda por parte de la autora; siendo cuestionada sobre cómo vive esta experiencia, compartió distintas vivencias que tuvo con su abuela, generando una conexión espiritual alejada un poco de la realidad cruel que viven las personas trans, gay o cualquier persona de la comunidad LGBT+.  La quinta estación fue dedicada a las distintas expresiones corporales existentes en el «cuerpo», siendo que es un libro lleno de experiencias corporales y sentidos.

Los presentadores mencionaron que algunos de los capítulos se pueden leer como si fueran cuentos, debido a como estos eran descritos, mientras que la autora nombró al libro con la metáfora de ser un «mar de emociones», siendo que el mar en algunas temporadas tiene momentos mansos, bravos y con tranquilidad, mencionando que el libro fue escrito con la técnica del psicoanálisis más que literaria. 

Como última estación se habló de «Las muchas Fridas», se leyó un último fragmento que habla de cómo fue para ella el tema de ser trans, y autoparirse, tomando el papel de «la mujer, la madre y la hija», ella lo menciona como un ejercicio de autodeterminación, algo que puede ayudar a definir quién eres y hacia dónde vas. Distingue a tres Fridas: la Frida del núcleo familiar, papá y mamá; la que se quedó sola con la mamá y por último la que se fue a la Ciudad de México, aunque ella sigue estando orgullosa de ser de Mazatlán.