Afirman que cultura cibernética ocupa el espacio literario
El autor de una de las primeras novelas de ciencia ficción en México fue el doctor Eduardo Urzaiz Rodríguez, quien fue recordado por su obra “Eugenia, esbozo novelesco de costumbres futuras”, en el marco del Simposio Literatura desde la Academia, organizado en la décima edición de la Feria Internacional de la Lectura Yucatán (FILEY).
En esta obra, quien también fue el primer rector de la Universidad Nacional del Sureste, “vislumbraba una visión de un mundo futuro sin guerras ni pobreza y con igualdad entre hombres y mujeres, y hacia ese ideal consagró su vida profesional y personal”, señaló la académica Cristina Leirana Alcocer.
Durante la inauguración del evento, la directora de la Facultad de Ciencias Antropológicas de la Universidad Autónoma de Yucatán (UADY), Rocío Cortés Campos, destacó la colaboración de la Red de Colaboración de Escritores Académicos, el Cuerpo Académico de Estudios Literarios de la UADY y la Universidad Juárez Autónoma de Tabasco para la realización de este encuentro, mismo que ella inauguró.
En su participación Olegario Ordoñez Díaz, director de la editorial Cátedra Pedagógica, recordó que “paradójicamente cuando más tuvimos que quedarnos enclaustrados, más hemos tenido la oportunidad de conocernos y estrechar los lazos de amistad a través de la virtualidad en realidad en estos tiempos de pandemia universal, más que nunca es urgente la palabra, el sentido y la solidaridad cultural internacional”.
La conferencia inaugural, titulada “Literatura y comunicación: del texto al hiperdiscurso”, estuvo a cargo de Elena Barroso Villar, catedrática de la Universidad de Sevilla, quien sostuvo que el significado de literatura no es unívoco y sus límites de significación son imprecisos, como se aprecia en el universo tecnológico de nuestros días.
En ese orden de ideas, ofreció una revisión teórica para comprender la literatura relacionada con la hipertextualidad.
Barroso Villar aseguró que el primer paso decisivo a la historia de dicho estudio lo constituye la aportación de Mijaíl Bajtin en el artículo “La palabra en la novela”, que data del año 1975.
“Entre las contribuciones que más se difundieron en teoría y en crítica acerca de la intertextualidad están, entre otros, las de Roland Barthes, Humberto Eco y Gerard Genette”, expuso.
Mientras que “Antonio Gómez Moriana hace interesantes aportaciones al estudio de la interdiscursividad”, señaló.
Explicó que la teoría se superpone “a las consecuencias de que en nuestra vida haya irrumpido internet y como no podía dejar de ser, haya invadido también el espacio literario”.
De ahí derivan, dijo, los textos electrónicos vinculados a una tecnología informática que se presentan en una escritura no secuencial, que se lee mejor en una pantalla interactiva.
La especialista citó el libro digital “Afternoon”, de Michael Joyce, elaborado con el programa de creación de hipertextos “Storyspace”, publicado en CD-ROM en 1990.
Continuó su exposición recordando que son antecedentes inmediatos del hipertexto electrónico las obras “El jardín se los senderos que se bifurcan”, de Jorge Luis Borges; “Rayuela”, de Julio Cortázar; así como “Las ciudades invisibles”, de Italo Calvino.
En el caso de la literatura española, comentó, se publicó en 1971 el hipertexto literario “El Jardín de las delicias” de Francisco Ayala, obra concebida a base de fragmentos intercambiables en su orden, e incluye elementos “que nos envían al nodo correspondiente”.
“Así pues la irrupción del hipertexto en la literatura elevó al infinito las posibilidades de estrategias comunicativas que ésta ya venía practicando”, afirmó.
Finalmente, argumentó que “la cultura cibernética ha acampado en el espacio literario como en los demás, en el comportamiento de la comunicación literaria muestra cambios fundamentales. El lector de hipertextos tiene puntos en común con de libros impresos, porque sin su colaboración ninguno de los dos soportes es capaz de avanzar”.
El proceso de la lectura sigue siendo lineal, explicó, pero elegido un nodo ha de leerse linealmente, de manera que lo no lineal es la ordenación que se puede elegir de los nodos.
Esta actividad, realizada como parte de las actividades de la décima edición de la FILEY, que organiza la Universidad Autónoma de Yucatán (UADY), está disponible en el canal de YouTube FILEY TV.