¿Te imaginas tener una pitón albina, escorpiones emperador, boas arcoíris, camaleones de cuatro cuernos o un cocodrilo de río como mascota?
Andrés Cota Hiriart representa el gran testimonio de la pasión que hay que tener y buscar en torno a las causas que uno cree a través de “Fieras familiares”. Es una entretenida historia biográfica del autor acerca de su relación con los más pintorescos y excéntricos animales.
El pasado 17 de marzo, durante La Feria Internacional de la Lectura Yucatán, el escritor inició su presentación relatando su vida desde la niñez y sus aventuras con la gran diversidad de mascotas que poseía; desde un cocodrilo llamado “Lupe” hasta una pitón albina que bautizó como “Güera Rodríguez”, en honor a su madre. Cota Hiriart, compartió como sus memorias y anécdotas personales se funden con precisión en la divulgación científica.
De igual manera, comentó como “Fieras familiares” representa un testimonio del estado deplorable al que estamos dirigiendo al planeta en temas de diversidad pero, también, representa un testimonio de esta pasión individual que motiva a emprender esfuerzos de conservación.
El también biólogo, zoólogo y naturalista, manifiestó sus razones de la producción de este libro en particular, “cuando profesas amor por los animales la mitad de tu chamba es convencerles o intentar contagiarles, si bien no amor por el animal, que al menos se le dé su lugar, se le aprecie y se den cuenta del asombro que puede ocasionar”.
Finalizó, explicando la razón de convertirse en escritor. “Escribir libros en este país es una cosa fútil, es algo que hay que encomendar un montón […]; un libro es un vehículo de comunicación no masiva, pero que consigue un contacto muy íntimo, y quizá el más poderoso, en comparación a otros medios” concluyó.
