Hay fábulas en verso y fábulas en prosa. Lo que no cambia de una a otra es que son relatos cortos que tienen como propósito la educación moral o la crítica social. Es por ello un género literario didáctico. Hemos oído hablar de Esopo, de La Fontaine, y hasta de Augusto Monterroso, fabulistas ilustres, pero poco o nada de Vishnú Sahma, a quien se le atribuye el Panchatantra, una colección de fábulas narradas en sánscrito, antigua lengua de la India.
Los personajes de las fábulas suelen ser animales que actúan como humanos; algunos estudiosos señalan que esto se debe a que en la India se cree en la transmigración de las almas.